A continuación relataré lo que ha sido mi experiencia con la mujer más importante de mi vida. En el año 2016 sobre el mes de julio llegué a un centro educativo para trabajar en calidad de docente de historia, fue muy normal el ingreso y la adaptación salvo a los pocos días cuando en sala de profesores me tope con una mujer de sonrisa tenue y reservada, de facciones finas, estatura media y cuerpo escultural, ojos miel, piel blanca, labios carnudos aunque no grandes y elocuente sonrisa,trabajaba allí hace algunos años haciendo las veces de profesora de Biología. Los meses transcurrieron sin ningún sobresalto, salía con mis nuevos compañeros de trabajo, de cuando en vez nos tomábamos unas cervezas, aprovechábamos y hablábamos sobre nuestro presente emocional y sexual sin que a la postre tuviese alguna novedad. Aveces visitábamos bares y discotecas, conocíamos mujeres con quienes entablábamos conversaciones y formas de contacto para vernos más adelante, todo esto propiciado por mi quien llevaba 2 años separado. En más de una oportunidad y a efectos del despecho manifesté querer conocer una mujer que realmente me conmoviera, que fuera inteligente, bella y virtuosa en la cama, mejor dicho pedí que fuera BUENA, RICA y PILA. Sin pretenderlo comencé a darme cuenta que SAMI, la profesora de Biología reunía todos esos requisitos, sin embargo me fue difícil notarlo dado que mantenía todo el tiempo en el laboratorio. No era mucho lo que hablábamos, mejor dicho nada salvo cuando la saludaba y aprovechaba para tomarla de sus rosadas mejillas y acariciarle el cachete con mis labios. También tratábamos uno que otro tema de índole pedagógico, más nada. Ella por su parte sabía lo que valía y lo sabrosa que estaba, por eso evitaba ser mirada, sospecho no quería ser presa de comentarios sexuales en su trabajo por sus compañeros, por lo que vestía de la manera más formal posible, prescindía de faldas y escotes, se cubría con una larga bata blanca, así seguro sería imposible mostrar su exuberante cuerpo comenzando por su cintura de avispa, culo mediado, redondo y de nalgas voluminosas, muslos bien proporcionados, tetas medianas, de buen contorno y paradas como si portara brassier transparente. Sin embargo noté como ninguno, una y otra vez lo buena que estaba, lo mucho que me antojaba conocerla, tratarla, hablarle, lo mucho que me importaba estar a su lado, motivo que aunado a su inteligencia y grandes dotes académicas permitió que olvidara pronto mi despecho y confinara todos mis intereses en conquistarla. No era fácil, jamás me daba pie para hablarle de otro tema que no fuese trabajo. Pero yo, un arrecho y mujeriego empedernido, de atractivo medio, con buena estatura y labia no estaba dispuesto a rendirme tan fácilmente, por eso en más de una oportunidad la invité a salir recibiendo como respuesta un no rotundo o una sonrisa que para el caso resultaba lo mismo. Transcurrían  los meses y nada pasaba, incluso hubo un viaje de fin de año a pueblo y preciso ella no fue, toda una desgracia. Llegó el 2017 y ella como siempre opuso todo tipo de obstáculos para que la relación profesional y personal de nosotros cambiara. No hostigo, no incomodó no soy un acosador, por eso siempre aguardé el momento en que todo fluyera de manera natural, empero  fue tanta mi persistencia que mis compañeros más cercanos notaron cuanto me gustaba y hubo que confesar lo que efectivamente estaba sintiendo. Una vez como nunca SAMI se fue deliciosa al colegio, ese día se desarrollaba una jornada de trabajo docente en la que no estaban citados estudiantes, portaba una blusa vaporosa , donde dejaba ver la formación y firmeza de sus tetas, un jean en donde se le veía el culo con todo su esplendor, se marcaba la silueta de su cintura, y una espalda armoniosa que era cubierta por su cabello rubio y lacio. Transcurrió la tarde y antes de que se fuera con total tacto le dije al oído susurrado: SAMI estás muy linda, ello sin reparo sonrió y se fue. Sentí que yo no le era indiferente por lo que días después la invité a salir y aunque en principio aceptó después canceló, pensé que no tenía chance. Cuando se excusó por la cancelación de la cita, nos quedamos mirándonos el uno al otro mientras ella narraba que le había sido imposible cumplir por que su mamá había enfermado, ahí entendí que yo le entraba en gracia. Al poco tiempo notando cuan duro trabajaba le recomendé viajar a San Andrés con su hermana para que disfrutará de unos días de descanso en el caribe, atendió mi recomendación y con una sonrisa y unas lindas palabras me agradeció el consejo. Culminó el año escolar y ahí resigné mis posibilidades, en tanto mis diferencias con la administración institucional me obligaron a irme y no saber más nada de ella. Antes de culminar el año le desee éxitos en su vida vía facebook. Este año desde comienzos me propuse contactarla e intentar proponer vernos con tan buena suerte que accedió. La invité a ver Cine y luego a Cenar  y tal parece que la sedujo el plan. Llegó puntual con un pantalón negro ajustado que dejaba ver sus jugosas nalgas, una blusa negra vaporosas y una chaqueta roja. Portaba un labial rojo intenso y mantenía su cabello rubio suelto. Encuentro que fue opacado por una intensa lluvia que al ella no portar paraguas soportó todo el baño de agua por completo. Vimos cine, cenamos y conversamos hasta la madrugada, me contó porqué era tan reservada para enamorarse, su poca experiencia sexual y porque era tan introvertida, cuales eran sus planes a futuro, cual era mejor dicho su proyecto de vida. Confieso también que casi toda la conversación me mantuvo entretenido, contento y erecto al no poder de dejar mirarla, al sentir goce con su tono de voz, al no poder dejar de disfrutar del momento, al no poder evitar morbosearla y al mantener mi mirada fija en sus tetas. La llevé hasta la casa y luego me tomé unas cervezas con un amigo celebrando la tan esperada cita que deseaba tener. Volvimos a salir al Jardín botánico y nuestra conversación y entrega de obsequios fue maravillosa, mediada por abrazos, libros y sonrisas. La tercera vez que salimos cenamos,bailamos y ambos entrados en confianza y con una botella de vino en la cabeza nos besamos una y otra vez apasionadamente. Desde ese día no paramos de hablar de sexualidad, tema del que ella a pesar de su condición de profesora de biología no era muy diestra. Ahora somos pareja, nos hicimos por convicción monógamos, hacemos el amor con amarres de corbatas, lo hacemos en el jacuzzi, nos gusta hacernos el oral, hablamos de cine erótico y de porno, amo chupar su coño, morder sus tetas y venirme en ellas, follamos con el anillo y la bala vibradora, tiramos frente al mar, visitamos playas nudistas, tenemos sexo telefónico, nos lo comemos en la casa de nuestros amigos en común, visitamos sex shop, nos masturbamos, fantaseamos con comernos (ella en ligueros y yo arrecho) en el laboratorio del colegio donde trabajamos, nos toqueteamos en la calle, en los parques, nos toqueteamos en los bares, nos toqueteamos en los buses, queremos hacerlo en su carro en plena carretera,  hablamos de hacerlo habiendo consumido hierba y de arriesgarnos cada vez más, en general hacemos nuestra propia historia de nuestra sexualidad con nuestros cuerpos. Estamos enamorados SAMI y yo y con ganas de comernos todos los días.