Tuve sexo con mi jefe, en su oficina, encima de su escritorio a las 12 del mediodía antes de irnos a almorzar. No tendría nada de malo si es que no fuera que ambos somos casados y yo soy amiga de su esposa. Me porte de lo peor como mujer y no tengo excusas que dar!

Entre mi jefe y yo siempre hubo una atracción y un coqueteo que por supuesto por respeto a nuestras relaciones nunca dejamos que se saliera de control ni que pasara nada.

Aquel dia en su oficina mi jefe estaba bastante ofuscado con problemas que habíamos tenido esa mañana, yo la verdad estaba tratando de ser una buena amiga y tranquilizarlo pero en ese momento el simplemente tuvo una reacción completamente inesperada pero que se sintió sumamente natural al mismo tiempo, me agarro por toda la cintura y me planto un tremendo beso muy apasionado en toda la boca.

Yo no se que me paso a mi, por supuesto que inicialmente estaba super confundida de ese tremendo beso, pero creo que por la atracción que siempre tuve hacia el, deje que las cosas siguieran pasando. El me empujo contra su escritorio sin dejar de besarnos y empezó a acariciarme los muslos y el trasero, yo me deje. En menos de lo que me di cuenta me habia metido todas las manos debajo del vestido y me estaba tratando de bajar el calzón.

Yo pude haberlo detenido, me estaba bajando el calzón, era obvio que quería cogerme. Sin embargo no lo detuve, mi jefe me termino de deslizar el calzón por las piernas y al llegar a mis pies me quito los tacos también.

Yo no podia creer su descaro de querer agarrarme asi de fácil y cogerme, pero tampoco podia creer mi propio descaro de permitírselo. Yo estaba sentada encima del escritorio, el me agarro por los muslos, puso todo su cuerpo entre mis piernas y empece a sentir la cabecita de su miembro entrando por mi cuerpo.

Tengo que admitir que lo sentí rico y tengo que admitir que si bien es cierto en un inicio estaba confundida, cuando el empezó a penetrarme la verdad es que en un momento sexualmente como mujer, yo también cedi. Lo bese, lo lami y le puse las piernas alrededor de su cuerpo mientras el empezó a penetrarme

El sexo fue extremadamente apasionado como se lo pueden imaginar, supuestamente no habia nadie mas en la oficina pero alguien podia llegar en cualquier momento incluyendo su esposa que muchas veces aparecía sin avisar durante el dia.

Creanme que aprovechamos cada segundo de riesgo al máximo. No dejábamos de besarnos y de lamernos casi como animales, el empezó a penetrarme con todas sus ganas y yo empezó a acariciarlo y estimularlo con mis pies para que no dejara de hacérmelo tan rico y fuerte.

Hacia mucho tiempo que un hombre no me agarraba asi tan salvaje encima de un escritorio. Yo siempre he tratado de comportarme como una dama en el trabajo con mi jefe pero creanme que en ese momento me comporte como una mujerzuela y quería que mi jefe me diera sexo de esa manera también.

Después de lo que fueron alrededor creo de 15 minutos, mi jefe empezó a decirme en la oreja “me vengo, me vengo adentro” Con lo rápido que habia pasado todo ni siquiera me habia dado cuenta que mi jefe me la habia metido sin ninguna protección. La verdad yo no me estaba cuidando tampoco pero por el placer tan rico de sentirlo venirse decidí correrme el pequeño riesgo. Le respondí en la oreja en medio de gemidos “vente vente adentro”

Mi jefe me agarro aun mas fuerte por las nalgas y empezó a penetrarme mas brusca y profundamente, lo estaba haciendo con todas las intenciones de ya venirse lo mas fuerte que pudiera. Para cualquier mujer es muy rico sentir cuando el hombre se viene dentro de una, sobre todo si se viene muy fuerte como mi jefe lo hizo en ese momento. Una siente que el hombre te agarra fuerte como si se le fuera la vida y esta ese climax increible super intenso que lo sientes clarito al hombre dar toda la lechita y sientes que tu le estas dando con tu cuerpo el placer mas grande de su vida! Asi mismo lo sentí a mi jefe ese dia, es rico, como mujer sentirlo a un hombre de esa manera, es muy rico.

Por supuesto que una vez que termina ese punto de máximo placer, empieza el momento incomodo y de arrepentimiento por la infidelidad que acabamos de cometer. Es ahi cuando nos damos cuenta lo que hemos hecho y se nos cae la cara de vergüenza.

El me solto las piernas, y se aparto para que yo me pusiera de pie, si claro el semen se me empezó a salir por las piernas. Ambos no sabíamos ni que decir en ese momento. Empezamos a recoger nuestra ropa del piso y yo para romper el hielo con una sonrisa le dije “quizás mejor hoy no almorzamos juntos” el se sonrió también y dijo “si esta bien” Me puse la ropa, salí de su oficina y fui directa al baño a limpiarme toda

Tengo que decir que felizmente el que tuvimos sexo no ha arruinado nuestra relación “profesional” si es que se puede llamar ahora asi. Creo que ambos simplemente hemos decidido no hablar al respecto para no complicar el trabajo. Su esposa Clarita vino a la oficina al dia siguiente y yo fui amable y amigable con ella como siempre lo he sido.

La verdad es que yo no tengo ninguna intención de buscar que pase nada mas con mi jefe y mucho menos reclamarle absolutamente nada. Lo que sucedió ese dia fue un error de ambos y creo que es mejor para todos y para nuestras relaciones que lo dejemos ahi.

Me gustaría terminar con un mensaje de madurez pero quiero ser sincera al escribir mi historia. Yo no pienso buscarlo ni provocarlo nuevamente a mi jefe, pero si mi jefe me vuelve a agarrar nuevamente como me agarro aquel dia, lo mas probable es que yo si vuelva a ceder. No puedo mentirles y no admitir que como mujer me gusto su sexo…. mucho. Jamas en la vida pienso decírselo pero la verdad es que si mi jefe quiere tenerme nuevamente, me puede tener.