Lincy Acosta

Sexo en obra gris ..

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Anonymous
Jul 19, 2018 06:53 PM 0 Answers
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Esta es la primera vez que hago algo como esto y supongo que  debo iniciar esta confesión contando un poco acerca del origen de la misma, desde pequeño crecí en un hogar donde mis padres se esmeraron por inculcar valores y principios, en donde el mundo era demasiado grande para intentar comprenderlo, por ende el sexo siempre fue un tema Tabú y un gran misterio para mi, conforme fui creciendo tuve un par de relaciones en mi adolescencia de la manera mas inocente, lo cual era propio de la época,  sin embargo al no ser físicamente muy agraciado y con una mentalidad de fantasía, pensaba que el cuerpo era un tesoro que no podía entregarse a placeres vanales y era para una sola mujer, aquella que supiera valorarlo ( Un poco cursi lo se ), sin embargo durante mi década de los 20 a los 30 años entre desilusiones, desengaños y algo de soledad tuve la oportunidad de tener algunos encuentros sexuales que me fueron despertando ese deseo de entender la sublime sensación de placer que me producía y mas aun el poder generar placer a una mujer.
Así bien hoy en día tengo 34 años, y encontré una mujer que adoro con el alma, es la mujer que le da color a mi vida y con la que tengo muchos planes a futuro, pero también siento que estoy en una época en la que físicamente no soy el mas atractivo, pero con gran carisma y caballerosidad atraigo al sexo femenino con cierta facilidad, y es que en mi vida me he mantenido alejado de vicios como el alcohol y el cigarrillo, de hecho me gusta mucho el deporte, en fin , pero he descubierto que una de mis adicciones y a las que no he podido resistirme es al sexo, no puedo evitar sentir la delicada piel desnuda de una mujer entre mis brazos, razón por la cual esto me ha llevado a múltiples relaciones fuera de mi pareja con las cuales he podido disfrutar, conocer y hasta aprender y crecer sexualmente y luego asi sorprender a mi pareja con cosas nuevas, no niego que esto en un momento me generaba mucho sentimiento de culpa, pero conforme pasaron los años y las mujeres creo que incluso he aprendido a manejar el tema de una forma clara y algo cínica, en donde hago lo posible porque ella nunca sufra una desilucion y yo no deje de vivir este despertar sexual de forma plena.
Ahora bien la razón de mi relato nos lleva a uno de mis encuentros con una de mis compañeras de trabajo, y decidí iniciar mis confesiones con este relato porque me pareció  oportuno ya que fue uno de los mas excitantes que he podido vivir; Ella llevaba cerca de 3 meses en la empresa y aunque de vez en cuando cruzábamos palabras, su mirada indicaba algo de gusto y cierto morbo hacia mi , y es que una mujer cuando quiere ser explicita y hacer notar deseo, lo hace de forma descarada y directa, lo cual me gusta, asi que de forma sutil me acercaba a despedirme de ella con un beso de aquellos en donde los labios van a la mejilla y logran tocar un extremo de los suyos, dejando unos segundos para que la sensación de querer mas la hiciera suspirar de forma en la que me hacia entender que quería que ese tímido beso fuera un poco mas allá.
Con eso en mente me fui aquella tarde pensando en un espacio dentro de la oficina en la que pudiera tener un espacio a solas, sin embargo era muy complicado ya que somos muchas personas trabajando en el mismo lugar y no podía dejar que alguien nos descubriera besándonos, pues en medio de todo sabia que por lo menos un beso podría obtener de ella, y no me equivocaba...
Y entonces recordé que en el edificio donde trabajo en el piso cuarto no hay nada, es decir todo el piso esta en obra gris, y solo hay columnas, ventanales y cemento, no es lo mas romántico, pero para un beso a escondidas no esta mal, pense..
La tarde siguiente seria la indicada pues yo salia a las seis de la tarde y ella tenia turno hasta las ocho, así que le escribí al celular diciéndole que en verdad quería tener unos segundos solo con ella para poder despedirme si sentir la mirada de media oficina pendiente de nosotros, y ella no dudo en aceptar, así que le dije que yo saldría primero y que la esperaría en el piso cuarto, por lo que llegada la hora ella " Salio por un café" y tomo el ascensor dos pisos abajo, allí estaba yo lleno de expectativa, y cuando abrió el ascensor y la veo salir siento deseos de abalanzarme sobre ella, mas la tomo de la mano y la llevo al fondo de el piso desalojado detrás de una columna, la mirada cómplice de ella me dice que esta asustada pero que igual de emocionada, así que me acerco lentamente y por primera vez tocamos nuestros labios, están tan cálidos , el primer beso debe ser suave, e intenso, mientras con mis manos tomo su cintura con firmeza,  son pocos segundo los que transcurren para que los besos comiencen a subir de nivel y de repente estamos jugueteando con nuestras lenguas,y en la medida que ella la mete y la saca de mi boca siento como la sangre caliente que corre sobre mi, baja hasta mi pene, logrando una erección que es inevitable sentir a través de mi traje de paño, rosando sus muslos de forma deliberada.
En ese momento la noche cae y solo la penumbra permite que  se vislumbren un par de sombras entre las columnas de aquella obra gris, en un instante paramos y al mirarnos vemos en nuestros rostros la expresión de querer despojarnos de la ropa que tanto estorba en ese momento, para mi fue una invitación a buscar algo mas, pues  era el primer encuentro y no quería sobrepasarme, pero mi instinto quería devorarla allí y en ese momento, por ello volví a besarla esta vez de una forma mas salvaje, su blusa medio escotada dejaba entrever unos dulces y perfectos senos, ansiosos de ser chupados y apretados, esto me prendía aun mas, así que con una mano empece a recorrer su espalda de arriba a abajo donde ella siente la yema de mis dedos y siento como sus manos aprietan mi espalda en signo de aprobación, en ese momento mi otra mano empieza a subir por su pantalón sobre sus muslos llegando al borde de su vagina que en esa altura se sentía el calor que de ella desprendía, allí supe que estaría totalmente húmeda y lista para juguetear un poco...
Pense que estaba yendo lejos cuando ella me sorprende poniendo su mano sobre mi pene , encima del pantalón, haaa chiquilla traviesa ya sabia lo que quería, sonreí, y deslice mis labios por su cuello mientras mi mano derecha se deslizaba sutilmente por su pantalón en medio e sus piernas, se sentía tan caliente que era inevitable sentir la humedad que de alli se desprendía, tan pronto ejercí algo de presión queriendo estimular superficialmente su clítoris, ella suelta en medio e su respiración algo agitada un leve gemido, perdiendo el control y desesperadamente ella desabrocha el cinturón de mi pantalón, baja la cremallera y mete su mano entre mi bóxer apretando fuertemente mi miembro que esta mas duro que de costumbre ella sube y baja su mano queriendo masturbarme con intensidad, yo de igual manera desabrocho su pantalón e introduzco mi mano en su panty, a diferencia de ella suavemente siento su humedad y recorro con mis dedos su vagina, siento su clítoris hinchado y atravieso mis dedos rapida pero suavemente hasta llegar al punto donde logro introducir mi dedo, han pasado cerca de diez minutos desde que bajamos  y ella debe volver al trabajo, pero en aquel momento yo solo quería penetrarla, así que bajo mi pantalón hasta las rodillas y ella lo hace hasta sus pantorrillas, con fuerza y determinación la tomo de la cintura la volteo de espaldas a mi y cuando veo su culo al aire libre pongo mi pene en la entrada de su vagina y de una sola embestida la penetro con fuerza, de tal manera que ella se apoya sus manos sobre la columna, esta posición me permite empezar a darle placer con cada embestida, luego aumento el ritmo y entro y salgo de ella rápidamente, mientras mis manos la toman por ese par de senos firmes y duritos que me invitaban a apretar cada vez que entraba, "que rico" decía ella y eso me excitaba mas, sin embargo cuando ella con una mano empieza a estimular su clítoris mientras yo la penetro por detrás, sentí que no aguantaba mas, baje el ritmo y me muevo en círculos dentro de ella mientra ellas mueve su mano cada vez mas rápido rozando su rodado clítoris extasiado de placer, me pide que le tome el cabello, por lo que con mi brazo derecho enredo su cabello al rededor de mi mano y halo con fuerza hacia abajo a medida que vuelo a penetrar con embestidas cada vez mas fuertes, sus mejillas sonrojadas y mi eyaculacion en sus nalgas fue prueba de aquel momento salvaje y totalmente inesperado de placer.
Tuvimos apenas tiempo de limpiarnos un poco y rápidamente subirnos la ropa interior cuando sonó la puerta del ascensor, en aquel momento la emoción y el susto fueron una mezcla de sensaciones, pues un vigilante entraba con una linterna pues habían escuchado ruidos, por lo que tuvimos que vestirnos entre la rapidez y el sigilo, escondernos mientras el vigilante se iba y salir, ella hacia el trabajo y yo fuera de la oficina, con una sonrisota en mi cara de aquel encuentro sexual en el que esperaba a lo mucho un beso a escondidas.
Mis queridos amigos creo que me emocione escribiendo y me excedí un poco, espero les halla gustado el relato y me cuenten que piensan de estos encuentros casuales y si desean leer algunas historias que tengo para contar.

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